Ciclo Truffaut
Fechas: 22, 29 de octubre, 5, 12 de noviembre, 3, 10 y 17 de diciembre de 2011.
Lugar: C.M.I. Pumarín Gijón Sur.
BabiesBebés
Todo el mundo adora a los bebés. Son graciosos, juguetones, torpones y muy tiernos. Son traviesos y curiosos. Pendencieros y aguerridos. Son frágiles, vulnerables… Pero, sobre todo, son nuevos, frescos, a estrenar.
«Babies» es esa clase de documental que, cuando uno lo ve, piensa: «¿por qué no se me habrá ocurrido a mí hacerlo?». Está abocado al éxito desde su origen, no sólo de taquilla, sino de crítica y público. Y su atractivo radica en su extrema sencillez: seguir a cuatro recién nacidos, de distintos lugares del planeta, durante su primer año de vida.
Dirigido y grabado en su gran mayoría por el francés Thomas Balmès, «Babies» se estrenó hace pocos meses en España. La idea que lo originó es en realidad de su productor, Alain Chabat, que llevaba más de diez años pensando en el proyecto.
Las localizaciones elegidas para grabar son lo más contrastado posible: Namibia, Japón, Mongolia y California. Porque, con el pretexto de los bebés, el documental en realidad aborda los grandes temas, los que de verdad tienen interés. Genética frente a cultura. Desigualdad social. Revisión de supuestos. Conflictos, coaliciones. Aprendizaje. Y juego.
Es, en palabras de su productor, «la más grande pequeña historia de todos los tiempos».
El perdón
Proyección del documental de Ventura Durall
Fechas: 3 de noviembre (20:00), 21 y 22 de noviembre (19:30) de 2011.
Lugar: Centro Municipal Integrado La Calzada (entrada libre)
Cine legal en la Red
Wuaki, Filmin, Cineclick y ahora Voddler. Y un poco más adelante, YouZee, Series.ly y Netflix.
No se trata de un trabalenguas, no, sino del futuro de la distribución cinematográfica. Bajo estos nombres tan «naïf», se esconden los grandes video-clubs online. Los cuatro primeros ya ponen a disposición del público español miles de películas y los tres siguientes prometen añadir en breve un cero a la suma total: ya es posible ver cine en Internet de manera legal.
En una entrevista publicada en El País, el director de Voddler, Markus Bäcklund, se muestra muy esperanzado. Declara que hasta ahora el internauta español no ha pagado por ver cine en Internet porque no se le ha ofrecido la posibilidad. Los catálogos de las empresas dedicadas a ello eran insuficientes de todo punto y al usuario le resultaba más fácil encontrar un título en su versión pirata que encontrarlo en la versión legal.
Pero esto va a cambiar progresivamente, dice Bäcklund, ya que los usuarios se acostumbrarán a la fórmula de pago por visión y los productores tendrán que adaptarse a la nueva situación. Una situación actualmente esquizofrénica, según él, ya que los estudios demandan enormes cantidades de dinero por poner su catálogo a disposición del espectador online.
Las previsiones de Bäcklund quizás sean demasiado optimistas. En un medio como Internet, que nace enarbolando la horizontalidad, la ausencia de control, la rebelión, y en un país como España, en el que el Lazarillo de Tormes retrata un rasgo cultural fundamental -a saber, la picaresca-, las previsiones de este empresario sueco podrían no cumplirse en absoluto. Al fin y al cabo, la tasa de piratería en España, según CEDRO, es de un 77 por ciento sobre las películas y de un 98 por ciento sobre la música, por lo que podemos asegurar que esta conducta, por lo mayoritaria, no tiene visos de cambio, al menos de momento.
Wikileaks detiene su actividad
Wikileaks se ha visto obligada a detener la publicación de nuevos contenidos debido al bloqueo financiero a que está siendo sometida. Desde diciembre de 2010, VISA, Mastercard y Paypal se niegan a prestar servicio a esta plataforma especializada en desvelar información secreta. Según su editor, Julian Assange, Wikileaks ha dejado de ingresar en este periodo el 95 por ciento de las donaciones (unos 50 millones de euros) que habría recibido si estas corporaciones le hubieran prestado servicio.
El Derecho a la Libertad de Información está recogido en la Declaración Universal de Derechos Humanos (Artículo 19) y tiene dos vertientes, la activa y la pasiva, es decir, todos los humanos tienen derecho tanto a informar como a ser informados. Las Democracias occidentales incorporan en su legislación el principio de acceso de los ciudadanos a los archivos y registros de la Administración, salvo si este acceso vulnera la seguridad del Estado (como en el caso de los planes de Defensa), la averiguación de delitos (el denominado «Secreto de Sumario», mientras un tribunal está instruyendo un caso), o la intimidad de las personas (Constitución Española. Artículo 105 b). El resto de los documentos de la Administración son públicos y por tanto, de libre acceso para cualquiera que los solicite.
Wikileaks ha vulnerado en algunas ocasiones estos límites, publicando informes de Defensa, así como información de entidades privadas -bancos o empresas- pero en general se ha dedicado a divulgar información que por ley debería estar a disposición pública.
Desde diversos ámbitos se ha intentado detener la actividad de la plataforma, pero sin éxito hasta la fecha. Parece que, al final, la asfixia financiera es el arma más poderosa contra la que se enfrenta Assange. No obstante, Wikileaks ha demandado a VISA y a Mastercard por violar las leyes antimonopolio de la Unión Europea -cuya resolución se espera para mediados de noviembre- y está ensayando vías alternativas de financiación. Por lo pronto, ha lanzado una campaña global («Wikileaks need you«) y ha puesto en marcha un dispositivo que burla el bloqueo financiero.
Sobre el acceso a la información
La puerta de no retorno
De lo particular, lo universal. La metonimia está muy bien valorada en el género documental, y con razón. Si de lo que se trata es de representar un universo inasible -inconmensurable- formado por todas las realidades materiales, ideales y espirituales que nos componen, es preciso seleccionar bien las más significantes.
Alphonse Zannou, natural de Benín, vive en España desde hace cuatro décadas. Aquí, mediante la venta ambulante, ha conseguido criar a su hijo Santiago, que hoy es director de cine. Conocido sobre todo por la «goyificada» película «El truco del manco», Santiago se ha lanzado ahora a la dirección de documentales, con uno sobre su padre.
«La puerta de no retorno» cuenta el regreso de Alphonse, tras estas cuatro décadas, a Benín. Es un viaje de ida y vuelta, porque la puerta se cerró tras él cuando vino a Europa y no todos le esperan con los brazos abiertos, ni los vivos, ni los muertos. Porque en Benín, gracias al Vudú, «cuando los muertos hablan, los vivos saben cómo oírles».
Pero Alphonse necesita ahora, casi ciego, golpeado por la edad, la soledad y la conciencia, arreglar las cuentas con el pasado.
Así, de una única historia emergen (como por arte de metonimia) todas las historias: la lucha, la necesidad, la verdad -la mentira-, el rechazo, la calumnia, la magia, el compromiso, la incapacidad, el amor, la paternidad, el dolor, la soledad, la migración, la pobreza, la vida… Y la muerte, claro.
«La puerta de no retorno» acaba de estrenarse. Se proyectará en cines. Y de la recaudación en taquilla dependerá que sus autores conserven -o no- sus casas recién hipotecadas.
Inside Job
Fecha: 28 de octubre de 2011. 19:30. Entrada libre.
Lugar: Centro Municipal Integrado El Llano (Gijón)
Más información: http://www.gijon.es/multimedia_objects/download?object_id=99747&object_type=document (página 18)
Flash WEBtv
Dossier RTPA
El futuro de la Radio Televisión del Principado de Asturias (RTPA), emisora pública creada en el año 2005, es incierto. A día de hoy, el Ente Público de Radiotelevisión ha dejado de percibir por parte del Principado los fondos que lo sostienen. Consecuentemente, los proveedores que han suscrito contratos con RTPA no están cobrando. Y los empleados están en vilo, puesto que la directiva de la Entidad asegura que no cuenta con dinero suficiente para abonar las nóminas de este mismo mes.
La intención del Gobierno del Principado es la de prescindir de una televisión autonómica que considera superflua y gravosa, lo cual ya había sido expresado en el programa electoral de su partido, Foro Asturias. En una situación de crisis, argumentan, la última prioridad es una televisión pública.
Demanda
RTPA ya ha anunciado que demandará al Gobierno del Principado de Asturias por un impago que inevitablemente desembocará en el cierre de la Entidad. Porque, aunque se estén manejando los términos «recorte» o «ajuste», lo cierto es que el impago que se está produciendo no es ninguna de estas dos cosas.
Los presupuestos destinados al mantenimiento de la emisora durante el año 2011 fueron aprobados por la Junta General del Principado en 2010 y publicados en la Ley de Presupuestos, por lo que al Gobierno actual le corresponde, con la Ley en la mano, atender a los pagos pertinentes, fuera cual fuera su programa electoral.
Hay que tener en cuenta que RTPA, basándose en los presupuestos aprobados, ha establecido contratos a lo largo de todo el año con proveedores de todo tipo, desde servicios de conexión vía satélite, hasta producción de contenidos, pasando por los servicios más básicos de mantenimiento, limpieza, electricidad, agua… Si RTPA no recibe el dinero que iba a recibir, no podrá atender a las facturas de sus proveedores los cuales, naturalmente, dejarán de prestarle servicio e iniciarán acciones legales contra ella.
Procedimientos
Antes o después, el Principado pagará sus deudas. Lo que sucede es que, si no reacciona a tiempo y el asunto se resuelve en los tribunales, el contribuyente tendrá que sufragar no sólo la cantidad que ahora se debe, sino también las multas por impago, las indemnizaciones por daños y perjuicios y las costas judiciales. Es decir, con esta medida, no sólo no se ahorra, sino que se pierde mucho dinero y se sobrecarga inútilmente los tribunales.
Si se desea cerrar una empresa pública (el Ente de Radiotelevisión del Principado es una Sociedad Anónima Unipersonal), o redimensionarla, ésta no es la vía. Es en la Junta General del Principado donde se deben dirimir tales cuestiones, y siempre en atención a los presupuestos del año siguiente. Si el presupuesto de 37 millones de euros anuales con que cuenta hoy RTPA es demasiado para unas arcas castigadas, se puede consensuar un presupuesto inferior. Si se desea reconvertir la empresa, aumentar en ella la participación privada -o privatizarla por completo-, cabe la posibilidad de hacerlo. Si se desea cerrarla, existen los procedimientos oportunos. Pero desatender las deudas nunca es una buena política.
Consecuencias
De hecho, Asturias ya está pagando las consecuencias. La Agencia Internacional de Calificación Crediticia Fitch ha rebajado la nota de solvencia de la región, lo cual constituye el prólogo a una estampida de inversores. Desde múltiples foros se está demandando al Gobierno asturiano que pague sus deudas.
Los empleados de RTPA, por su parte, ya han iniciado una recogida de firmas contra el cierre. La mayoría de ellos obtuvieron su plaza mediante oposición (o concurso oposición) cinco años atrás y no entienden que la Administración se desentienda de este modo de las obligaciones contraídas.
El sector del audiovisual en Asturias se encuentra en plena emergencia. La creación en 2005 de la RTPA sirvió para que en un plazo de dos años se formaran 22 nuevas empresas audiovisuales en la región (un aumento del 19 por ciento sobre la cantidad anterior). Se calcula que en torno a 1000 familias obtienen hoy sus ingresos mediante actividades relacionadas con el Ente. RTPA ha propiciado la creación de un Cluster del Audiovisual en Asturias, de la Asturias Film Commission y ha posibilitado la existencia de la mayor escuela audiovisual de la región; en definitiva, ha impulsado el sector, haciéndole alcanzar cotas imposibles anteriormente. Pero esta andadura comenzó hace poco más de cinco años, y el audiovisual asturiano apenas ha tenido tiempo de despegar.
Gestión
Ciertamente, la gestión del Ente en los últimos años es criticable. No se ha fomentado tanto el desarrollo de empresas de la región como sería deseable. Por ejemplo, se han destinado inversiones millonarias a la adquisición de Derechos de retransmisión de la Fórmula 1, o de la Liga de fútbol, cuando estos contenidos estaban siendo emitidos simultáneamente por cadenas nacionales. Se ha practicado una opacidad en la contratación que fue denunciada por la Asociación de Productoras de Televisión de Asturias (APTVA). Se ha abusado de las conexiones en directo durante los informativos, no siempre justificadas, con el alto coste que ello implica. Y, según Francisco Álvarez Cascos, presidente del Principado, es un medio que «se ha puesto al servicio de la vanidad del Gobierno».
No obstante, Demométrica ha realizado una encuesta según la cual el 81 por ciento de los asturianos está satisfecho con RTPA. En buena medida, este balance positivo del ciudadano se basa en que el servicio que presta una televisión autonómica no tiene sustitutivos, es decir, ninguna televisión nacional ofrecerá la misma atención a una región en concreto que una televisión autonómica, y ése es un factor a tener en cuenta.
Reconversiones
El gran peso de la minería, la industria, la pesca y la ganadería en Asturias a lo largo del siglo XX provocó que, en los albores del siglo XXI, frente a la nueva situación impuesta, la economía asturiana tuviera que reconvertirse. Las actividades tradicionales dejaron de ser rentables para la región, el cumplimiento de la normativa europea restó competitividad y los asturianos se vieron obligados a explorar nuevos sectores productivos. Creció entonces exponencialmente el peso del turismo y también, progresiva y consecuentemente, el de la Cultura. La creación y acondicionamiento del Centro Niemeyer y de Laboral Ciudad de la Cultura ejemplifican bien esta reconversión.
RTPA acude a apoyar, desde la Cultura y desde las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación, esta diversificación de la actividad económica de la región. No sólo crea empleo en el sector de la televisión, sino que sirve de embajador en todo el mundo a través de su canal en Internet -muy especialmente en Iberoamérica- y la producción cinematográfica asturiana, aunque aún es incipiente, podría encontrar a un gran aliado en la cadena, si ésta se mantuviera.
Su cierre denotaría un drástico cambio en las políticas de reconversión económica, más cuando también se teme por el futuro del Centro Niemeyer. ¿Asturias ya no aspira a convertirse en potencia turística, en capital cultural? ¿A qué han de dedicarse los asturianos, en qué deben invertir? ¿Dónde está la clave de la riqueza en Asturias? Volver a la mina no es una alternativa, después de haber cobrado millones de euros de los fondos europeos para la reconversión, así que la vía del turismo y la Cultura, toda vez que ya son caminos iniciados, no parecen tan mala opción.
Que TPA necesita un cambio -una evolución- es algo que incluso los propios empleados reconocen, pero su extinción, lejos de resolver la crisis, contribuirá a agravarla. Y en cualquier caso si -tal y como reza su Constitución- España es un Estado de Derecho, sería exigible que el Gobierno pagara sus deudas y cumpliera las leyes.